Los recortes de Rajoy punto por punto.
Los recortes suponen un ajuste de 65.000 millones de euros en los próximos dos años y medio, incluyendo ingresos y reducción de gastos
Hace falta tener muchísima caradura para no cumplir ni una sola promesa electoral y cambiar de criterio con tanta facilidad. Con esta fea costumbre de tomar por idiotas a los ciudadanos todo el rato, resulta imposible saber lo que realmente se está votando.
Sobre los duros recortes, habrá quien piense que no queda más remedio, y puede que incluso tengan algo de razón, yo no lo sé con seguridad, pero lo que tengo muy claro, es que todo esto resulta inaceptable si los culpables de este esplendoroso desastre se van de rositas con los bolsillos llenos.
La forma en que se exigen estos duros sacrificios viene acompañada de un talante arrogante y prepotente digno de cualquier régimen dictatorial puro duro.
De la noticia siguiente hace sólo dos días:
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha asegurado que su partido «presta todo el apoyo» a Rodrigo Rato y a Ángel Acebes tras su imputación como miembros de la dirección de Bankia, una imputación que ha calificado de «genérica» y de «inusual» por producirse simultáneamente a la admisión de la querella presentada por UPyD. Ninguno de los dos, además, va a ser suspendido de militancia. «No tenemos pensado hacer tal cosa», ha zanjado.
¿Están las cosas como para permitir que todos los chorizos que han llevado a todo un país a la ruina se vallan de rositas con los bolsillos llenos? El cinismo es tal, que solo falta que nos pidan comprensión para esta pobre gente, porque tienen tanto dinero que no sabrán que hacer con él.
Finalmente, en el PP se han dado cuenta de que tendrán que hacer algo más que lloriquear. Se amontonan las denuncias y la imputación de Rato y el interés de este por explicar su gestión en el Congreso han sido tenidos finalmente en cuenta por el PP.
El PP accede a que Rato explique su gestión de Bankia en el Congreso.
Rodrigo Rato ha pedido comparecer en el Congreso de los Diputados «lo antes posible» para explicar su gestión al frente de Bankia, y el Partido Popular ha accedido a ello.
El PP ha dado vía libre a su comparecencia a puertas abiertas en la Comisión de Economía del Congreso junto con otras 24 personalidades. El Grupo Parlamentario Popular en el Congreso solicita sus comparecencias para este mismo mes de julio en la subcomisión del FROB, aunque como esta es cerrada se sustanciará a la Comisión de Economía.
Entre las más destacadas están la ex vicepresidenta económica Elena Salgado; el ex ministro de Economía Pedro Solbes; el ex gobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez y el actual, Luis Linde; el exsubgobernador del órgano regulador Javier Aríztegui; el actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri; el ministro de Economía, Luis de Guindos; el ex presidente de Bancaja José Luis Olivas, el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Julio Segura; y el ex secretario de Estado de Economía José Manuel Campa.
En resumidas cuentas, en el PP continúan instalados en la defensa a ultranza del compañero Rodrigo Rato, pero por lo menos empiezan a comportarse como si realmente hubiera ocurrido algo grave. El problema es que para ello hizo falta que los tribunales imputaran a Rodrigo Rato. Se requirió para ello una denuncia de un partido minoritario como UPyD, de la asociación 15M, y de una ONG católica.
La actitud de desprecio a la ciudadanía desde la inmunidad por cuatro años que les da la mayoría absoluta, queda aún más clara en el siguiente ejemplo.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha asegurado este miércoles que el apoyo a los mineros en Madrid «ha sido modesto» ya que según ella tenía entendido, fue de unos 20.000 manifestantes, pero que para obtener un concejal hay que llenar «dos veces el Bernabéu».
Véase la foto de la Gran Vía Madrileña y díganme si la mitad de los que se ven en ella caben en algún estadio.
En cualquier caso, esas declaraciones ante una de las manifestaciones pacíficas más importantes en la capital de España serían dignas de cualquier dictador sin escrúpulos.
En este caso, el dudoso honor a tan repugnantes declaraciones le corresponde a la presidenta de la Comunidad de Madrid y ningún cargo público debería continuar en su puesto después de unas declaraciones tan despectivas hacia su propio pueblo.
Lo peor no es que sean despectivas, sino que buscan provocar y crispar en un ambiente ya peligrosamente recalentado. Pura mala leche.
Quizás mejor que caer en la lógica indignación, habría que intentar comprender como es posible que estos excesos políticos tan surrealistas ocurran en una democracia moderna.
¿Cómo es posible que la democracia se distancie tanto de la ciudadanía?
Si pensáramos que esto es propio de un partido concreto nos estaríamos equivocando. El PSOE también se hartó de pisotear derechos ciudadanos, y si no hubiera sido así, el PP no habría sacado mayoría absoluta ni la crisis económica sería tan gravísima.
Se trata de un problema más general derivado del aumento del poder de los mercados en un contexto económico globalizado.
Para solucionar un problema hay que comprenderlo. ¿Acaso es nuevo que los políticos intenten dominar a su pueblo?
Esto no es nuevo, lo que ocurre es que la ciudadanía hace tiempo que logró unos derechos democráticos que permitieron controlar a los políticos, y parece increíble que estando en democracia alcancemos las cotas actuales de desfachatez y de abuso político.
Hemos llegado a un punto de perversión de la democracia que necesitamos analizarlo desde una perspectiva más amplia. Si lo hacemos así podremos darnos cuenta que aunque en España estemos alcanzando niveles inasumibles de desfachatez política, la deriva antidemocrática es un fenómeno general que afecta a muchos países, y que constituye una tendencia que acompaña al fenómeno de la globalización.
Hagamos un breve repaso histórico.
Nacimiento de las democracias modernas:
En nuestra historia no existe un punto inicial para el arranque de las democracias. Estas fueron surgiendo como consecuencia de la conquista de una serie de derechos humanos.
Los precedentes democráticos datan de las breves experiencias de unas pocas ciudades estados de La Antigua Grecia. Una de estas experiencias ya ocurrió en Atenas en el año 500 a. C.
En 1776 la Independencia de Estados Unidos estableció un nuevo modelo de instituciones políticas con base democrática.
Más tarde la Revolución francesa de 1789 y la Guerra de Independencia Hispanoamericana (1809-1824), difundieron las ideas liberales, los derechos humanos, y el constitucionalismo.
Gracias a este último los modelos democráticos se han ido refinando a partir del siglo XX, con la abolición de la esclavitud, la conquista del sufragio universal, el reconocimiento de la igualdad legal de las mujeres, la progresiva extinción del colonialismo europeo, el reconocimiento de los derechos de los trabajadores y las garantías de no discriminación para las minorías raciales y étnicas, la libertad religiosa, y otros valores de defensa de las libertades individuales.
¿Por qué padecemos esta crisis política y económica?
A lo que nos estamos enfrentado es a un fenómeno de involución en materia de derechos humanos. Esto ocurre unas veces tocando las leyes y otras simplemente convirtiéndolas en papel mojado.
La idea de que el poder emana del pueblo soberano, ya no es un principio de acción política sino una bonita frase que los políticos repiten sin hacerla suya. Han transformado a los ciudadanos en una casta inferior indefensa ante las contínuas deslealtades políticas.
¿Pero por qué ocurre esto? ¿Que es lo que ha cambiado? ¿Por qué los políticos tenían antes miedo al poder de un pueblo indignado y ahora la indignación solo sirve para reafirmar el poder y la arrogancia de nuestros gobernantes ante la impotencia del pueblo?
Los políticos han usado el aumento del poder financiero derivado de la globalización en su propio beneficio, y gracias a él han aprendido a controlar a sus ciudadanos mediante el uso de la manipulación mediática, de la injusticia social, y del apoyo de las grandes corporaciones financieras.
La cosa es bien simple: El poder político está mejor apoyado que nunca por otros poderes ajenos a los intereses de la ciudadanía.
Por todo ello vivimos en una crisis fabricada por una casta de personas que con forman el poder en las democracias actuales. Las convocatoria electorales vienen precedidas de toda clase de manipulaciones, engaños, intoxicaciones, marketing, ingeniería social, campañas, promesas falsas, etc. En su mayor parte todo ello está financiado con el dinero de los propios ciudadanos.
La nueva casta está formada por el poder político, poder mediático, poder financiero y poder judicial. Ninguno por separado podría controlar a la ciudadanía pero todos juntos son capaces de anular la idea básica de la democracia que no es otra que el poder emanada del pueblo soberano. Ahora ellos son el poder.
El nacimiento de la indignación como fenómeno social:
En España llevábamos bastantes años de bonanza y acogiendo a inmigrantes deseosos de vivir en el paraíso español, pero eso se acabó y los inmigrantes ahora emigran de vuelta. El aumento de la corrupción, del despilfarro y del paro nos han llevado a la ruina.
Múchos jóvenes sobradamente preparados y sin perspectivas de futuro también emigran. Ya no son tiempos de bonanza y las reglas del juego han cambiado. El pueblo español tomó conciencia del problema en 2011. 15-M, Indignados, Spanish revolution marcarón un antes y un después. Algunos quieren dar por enterrado este movimiento cuyo espíritu está más vivo que nunca.
El 15 de mayo de 2012 las manifestaciones fueron importantes, pero se detectó que una parte de la ciudadanía se había desconectado del movimiento. Creo que este tipo de movimientos maduraran con la decepción porque las elecciones en las que el PP sacó mayoría absoluta estaban demasiado cercanas al 15m de 2012 y muchos de los que votaron al PP realmente pensaron que habían votado algo muy diferente a al PSOE.
Mucha gente se desengañó con el PSOE y ahora mucha gente se desengañará con el PP y poco a poco este bipartito infame empieza a hundirse en su propia podredumbre.
Paralelismos con la revolución francsa:
La violenta revolución francesa vino precedida del insoportable abuso de toda una clase aristocrática.
Los políticos actuales no se identifican con aquellos aristócratas de entonces que terminaron en la guillotina, porque asumen que estando en democracia la situación es muy diferente.
En efecto hay diferencias, pero en mi opinión, pese a que tenemos la posibilidad de votar cada cuatro años, la situación actual no se corresponde con una situación de estabilidad propia de una democracia plena.
Cuando los gobiernos caen en la arrogancia, en los amiguismos, en la corrupción y la prepotencia, se ven obligados a hacer un uso creciente de su poder en detrimento de su pueblo y todo ello deriva en un sistema parasitario y decadente.
Un poder así siempre será un poder inestable porque si bien en tiempos de bonanza todo parece ir bien, en el momento en que la situación económica empeora, la cosecha de amiguismos pierde toda su utilidad.
La época de vacas flacas es la de sálvese el que pueda y los amiguismos se convierten en egoísmos. Dentro de esta manada de lobos hambrientos de riquezas, nadie renunciará a su jugosa tajada aunque ello amenace a la totalidad del sistema.
La nueva aristocracia son los políticos y su legión de amiguetes:
El mercadeo de influencias es una forma de acrecentar el poder político y de explotar a la ciudadanía. Estos mercadeos establecen un círculo vicioso perverso que tiende al descontrol. Cuando se llega al límite de lo que los ciudadanos pueden aguantar, lo normal es que todo termine estallando con violencia.
En España los mineros han visto como de la noche a la mañana les han condenado a morir de hambre a ellos y a comarcas enteras cuyo único medio de subsistencia es el carbón.
Quizás ya no sea rentable esta industria y deba desaparecer, pero en este momento, las razones son lo de menos, porque el hambre no es una opción válida para nadie.
Esta situación del carbón es una situación que no es nueva. Deberían haber reconvertido el sector gradualmente, en lugar de jugar a sacar votos con los subsidios permanentes a una industria insostenible.
Los duros recortes acompañados de la subida del IVA en productos de primera necesidad, los desaucios que ni siquiera cancelan la deuda contraída con el banco, etc. están colocando a muchas personas en situación límite de supervivencia.
De una postguerra se sale trabajando mucho y mal viviendo, pero de una situación donde toda la economía desvía los frutos del trabajo para el pago de una deuda que no hace otra cosa que aumentar, podríamos no salir nunca hasta que todo reviente.
El principal error de la aristocracia francesa fue infravalorar la fuerza de un pueblo que fue creciendo en indignación, y en ese sentido estamos ante una situación parecida. Cuando el pueblo no puede confiar ni en sus dirigentes ni en la justicia, puede terminar tomándose la justicia por su mano y surge un caos donde todos lo pierden casi todo. Algunos incluso la cabeza.
Tenemos precedentes de estallidos sociales en las revoluciones de la primavera árabe que vienen sucediéndose desde 2010. En estas protestas se exige más democracia, y más derechos humanos. En estos países se rebasó ese límite donde todo estalla en un gran conflicto, y nosotros en España nos mantenemos aguantando cada vez con más dificultad.
Conclusiones:
Veo muy complicado que el PP aguante otros 3 años a base de mandar gente al paro, subir impuestos, recortar prestaciones e insultar a todos los ciudadanos.
Espero que la próxima vez que acudamos a las urnas, tengamos la sensatez de no volver a votar ni al PP ni al PSOE porque son partidos esclavizados por una enorme cantidad de poderosos amigotes cosechados durante décadas.
Necesitamos un partido virgen en el ejercicio del poder que tenga las manos libres para poder enviar a la cárcel a los enemigos de la democracia.