La Obsolescencia Programada (OP) es algo tan corriente que forma parte de nuestra vida cotidiana y por ello no la cuestionamos. Si un fabricante se saliera de esa disciplina corporativa y renunciara a esa política de OP podría presentar esa resistemncia al paso del tiempo, como un gran valor añadido, pero no lo hace porque sabe que va en detrimento de los intereses de todo el sector.
Por lo tanto, existe un corporativismo que funciona en contra de los intereses de los consumidores para que estos se vean continuamente obligados a consumir. Gracias a eso la producción de estos bienes de OP se producen en mucha mayor cantidad de la necesaria contaminando con sus desechos el medio ambiente, consumiendo recursos naturales, y con el secuestro de los clientes que se convierten en dependientes de un consumo creado artificialmente para aumentar la producción y los beneficios.
Un frigorífico sin obsolescencia programada duraría cerca de 70 años. Hoy en día, vender un producto así con un beneficio razonable terminaría por hundir a la empresa que lo fabrica.
Esta programación de la obsolescencia requiere en muchos casos de una inversión previa considerable para ajustar con precisión la vida media de un producto al tiempo deseado. Para ello se hace numerosas pruebas.
http://youtu.be/lgXJIRztXcQ
La funcionalidad de un producto también se ha limitado artificialmente con frecuencia para obligar a comprar productos de una gama superior a mayor precio. Por ejemplo procesadores con funcionalidad capada.
La desvergüenza de algunos fabricantes de impresoras llega hasta el extremo de incluir un microchip que sirve para contabilizar el uso del aparato e inutilizarlo cuando este alcance el número de usos programado.
Recuerdo que en cierta ocasión fui a la casa oficial de mi reloj de pulsera (la marca no importa) para comprar una correa de plástico, y me preguntó el técnico que si la correa tenía dos años. Eché cuentas y en efecto eran dos años. No tuvo inconveniente en decirme que la nueva correa duraría otros dos años y exactamente así fue. Le pasó lo mismo que a la anterior. Empezó a rajarse por el mismo lugar.
En España para evitar abusos se obligó por ley a una garantía de dos años para todos los productos. Recordemos que Apple fue demandada por diseñar su iPod con una batería no recambiable y con una obsolescencia programada. Apple prefirió pactar y compensar a los usuarios afectados ofreciendo garantía de dos años de funcionamiento para su iPod.
En productos más contaminantes como por ejemplo las lámparas fluorescentes el ciclo debería ser mucho más largo o directamente prohibir su uso por su contenido en vapor de mercurio. El mercurio termina en el mar y llevamos décadas contaminando el mar. Por ello el retorno de este potente veneno ya empieza a ser considerable y afecta a nuestra salud a través de la ingestión de pescado azul como el bonito o el atún.
¿Te has preguntado qué tienen en común los productos BIC?
Bolígrafos, encendedores, medias, maquinillas de afeitar… Son productos baratos (desechables). Generalmente de un solo uso, y se venden en tiendas o en quioscos, donde se vende de todo un poco. Lo último es un móvil BIC. Móvil de bajo coste: Bic Phone
BIC es una empresa altamente contaminante por el escaso uso de sus productos.
El crecimiento no es un concepto sostenible:
El crecimiento de la producción se ha convertido en el objetivo principal de la industria en perjuicio de la calidad de vida de los ciudadanos y del interés general. El flujo de materiales de desecho están destrozando el planeta. Incluso hay países del tercer mundo como Ghana que han sido utilizados como basureros para recibir ingentes cantidades de basura altamente contaminante que nadie quiere.
Uno de los problemas de continuar aumentando el crecimiento y la productividad es la falta de sostenibilidad en un planeta con recursos limitados.
La falta de sostenibilidad de los modelos económicos está alcanzando un punto de máxima inestabilidad.
La responsabilidad del consumidor:
El remedio para no sucumbir a la espiral consumista que esclaviza a la clase media pasa por algo a la vez sencillo y muy complicado de conseguir. Los consumidores debemos ser más exigentes, menos compulsivos en nuestras compras y hacer un consumo responsable. De este tema ya hablé en otro artículo: Una asignatura pendiente consumo responsable. Por ello prefiero no insistir.
emanuel
es verdad los productoa apple no son muy buenos.
y lo descartable siempre va a ser perjudicialpara el medio ambiente, porque usan materia prima que tiene poca degradabilidad.