Manta de jarapa.

Manta de jarapa.

En casa de mi abuela recuerdo que existía un gran sofá con una tapicería maravillosa. Desde chico me llamó la atención ese tejido, por su peculiar tacto, y por su caótico colorido. El diseño de aquella jarapa era muy parecido al que aparece en la foto de cabecera.

Según me cuenta mi madre, mi abuela descubrió este tejido en Huércal-Overa donde tenemos familiares allí. Lo usaban como tejido fuerte, para colocarlo debajo de los colchones y evitar que el roce de los somieres  rasgara el colchón. En la Wikipedia compruebo que este uso para la jarapa no era excepcional, sino una costumbre muy extendida en la zona.

Mi abuela decidió que aquella preciosidad de tejido merecía mejor destino, y encargó varias jarapas, una de ellas la uso para tapizar su sofá eligiendo ella misma los trapos para su reciclado.

La jarapa además de ser un tejido muy bonito y con un tacto agradable, tiene una gran resistencia a todo tipo de maltrato. Mi madre aún conserva una de las jarapas que mi abuela usó como cortina, y que ahora mi madre usa para forrar una colchoneta (Ya tiene años la jarapa esa).

Para usar los trapos se rajaba la tela a lo largo sin llegar al final y luego se hacía otra raja en sentido contrario, creando una larga tira de trapo en zigzag. Las tiras sueltas se encadenaban unas con otras mediante algunas puntadas de hilo hasta crear la bola de ovillo con la tira de trapo.

Mi madre recuerda como preparaban el material de ovillos de tiras de trapo que llevaban al telar. Al parecer se usaban trapos de cualquier color y para hacer esos ovillos se rompían en tiras de centímetro y medio aproximadamente.

En la jarapa, las tiras de trapo van en un sentido y los hilos para el entramado van en sentido perpendicular.

Cuando veas un diseño bonito en una jarapa piensa que en gran medida es fruto de la casualidad. Se pueden combinar colores, pero el diseño final es un tanto imprevisible.

En la Wikipedia tienes más información sobre la jarapa. Un tejido muy especial.