Es una pregunta sobre la cual, no podemos ofrecer una respuesta clara, pero haremos un análisis con los datos que conocemos, que no son muchos, y veremos que necesariamente debe tener una enorme repercusión económica. Muchos usuarios son autoconsumidores y hacen un consumo total de uno o dos ejemplares de sus obras, pero la norma obliga a producir otros cinco para el depósito legal, lo cual acarrea un considerable aumento del precio de producción,.
Todos los servicios de impresión bajo demanda españoles, en este momento creo que sí están funcionando generando un DL porque es una obligación que afecta a los impresores y ninguno se libra de eso. Además, os informo que Bubok en un correo electrónico me reconoció que es así.
Yo dudo que Lulú antes de la subida pudiera costear un depósito legal (DL) de 5 libros, no me salen las cuentas. Los libros salían a muy buen precio, pero posiblemente detrás de la opacidad de este negocio se ocultaba una situación anómala, que se vieron obligados a modificar con la entrada de 2009. Son elucubraciones, porque Lulú no dió explicaciones mínimamente coherentes.
La nueva legislación del mundo del libro cambiará y podría cambia lo del DL precisamente para ajustarse a las necesidades de este tipo de negocios. Se intentará seguramente que solo sea obligatorio a partir de un determinado número de ejemplares. Esperemos que la nueva ley contemple una flexibilización de la norma. Tampoco tiene sentido estar produciendo seis ejemplares para que solo se venda uno en muchos casos.
Bubok, y probablemente Lulú tienen actualmente unos gastos de producción que están trasladando al usuario final. No sé cómo lo traslada Lulú. No sé exactamente eso como lo hacen, pero Bubok sí reconoce estar pagando el coste de este DL. Yo creo que Lulú después de la subida también. No podemos hacer más comparaciones ni más supuestos, pero el comportamiento de ambas compañías ha sido bien distinto. Ojalá ambas fueran más transparentes.
Si el traslado del coste del DL se hiciera bien, deberían cobrar mucho más al que vende o consume un solo libro, que al que vende o consume una cierta cantidad. Sería lo justo. Las impresiones de Lulú fuera de España puede que no se hagan con DL, y ello explicaría porqué salen más baratas, pero de momento aquí sí se hace DL.
Todo parece encajar, y creo que lo que sucedió con la famosa subida de Lulú, a finales de 2008 fue el resultado de un cambio de las condiciones de impresión bajo demanda que seguramente se estaban haciendo sin ese costoso requisito legal. Eso explicaría el motivo por el cual ocultaron los verdaderos motivos de la subida. Mejor dicho, quizás lo explicaron a medias y no supimos adivinar que pasaba. Todo esto son deducciones personales porque dijeron que los costes de producción habían subido, y ninguno lo creímos porque el mercado de impresión bajo demanda está a la baja, pero probablemente, y por increíble que parezca, dijeron la verdad. Sospecho que los costes de producción subieron de forma dramática para ellos, por el tema del DL, pero no para otros, que ya estaban cumpliendo el requisito. En cualquier caso, si no fue eso, tampoco dieron ninguna explicación coherente. La reacción de los usuarios fue de sorpresa y de incredulidad, nada tenía sentido. Algo gordo pasó está claro, porque no solo nos perjudicaron a nosotros los usuarios, se perjudicaron ellos mismos y entraron en una dinámica totalmente diferente en la que muchos usuarios se sintieron maltratados y traicionados. Sospecho que Lulú dijo la verdad, los precios de producción aumentaron, pero igualmente sospecho que no dijo toda la verdad. Puede que faltara decir lo más importante. Lo que ellos dijeron quedó como algo carente de lógica, y cabreó a mucha gente.
Un autoeditor puede moverse y buscar salida para sus obras con sus propios medios. Los servicios integrales, como Lulú y Bubok representan una comodidad que siempre tendrá un precio. En ese precio incluyo el tema de la transparencia, del control, y de la comisión final que siempre, siempre tendría que variar en función del número de ejemplares vendidos. Hay demasiada gente que solo vende o consume uno o dos ejemplares. No es lo mismo comprar un caramelo, que una caja de caramelos, que un palé de cajas de caramelos, o que una carga completa de un camión cargado de cajas de caramelos.
Bubok tiene que cambiar algunas cosas, pero tiene sede social aquí en España, y considero que es imprescindible la presencia de sede social en la Comunidad Económica Europea para poder exigir nuestros derechos. Lulú puede hacerlo cuando quiera, pero ha preferido no comunicar su sede si es que existe. Yo de momento no voy a poner mis obras en esos mal autodeniminados servicios integrales para autoeditores, (Son editoriales lo admitan o no), pero tampoco puedo meter a todo el mundo en el mismo saco. No sería justo. El panorama de autoedición seguro que va a cambiar mucho, pero creo que es mejor no quedarse esperando a ver que pasa, sino moverse e investigar otras salidas diferentes de los servicios integrales para autoeditores.
Lulú para mí queda fuera mientras no se aclare si tiene o no sede en la Comunidad Económica Europea. Es un hecho que considero inasumible para un escritor autoditor que piense en vender sus obras. Por el contrario, Bubok creo que tiene posibilidades de adaptarse con éxito y encontrar una fómula más satisfactoria que la actual, para ofrecer una opción justamente retribuida a escritores autoeditores enfocados en la venta, y no solo para autores autoconsumidores.
Seguramente cuando el requisito del DL cambie, ambos, Lulú y Bubok, estarán en disposición de ofrecer mejores precios, pero si ofrecen las mismas condiciones al que vende un par de libros, que al que vende doscientos, significará que se enfocan en el negocio de autoconsumo y a los que más venden les estarán ofreciendo unas condiciones nefastas y opacas. Las rebajas por pedidos grandes es un tema independiente, porque se trata de generación de beneficios. Un autor puede lograr ventas importantes de libros de uno en uno, y eso no puede ser tratado de la misma forma que el que se edita un libro, se lo compra y ya no vende ni uno más.
Cuando la ley en España sea modificada, y se contemple una nueva disposición legal relativa al DL para servicios de impresión bajo demanda, más acorde con las necesidades actuales, seguramente Lulú podrá volver a bajar nuevamente los precios, pero para mí la situación de Lulú es diferente de la de Bubok. La forma en que se ha comportado, la desatención de algunas reclamaciones por pérdidas de envíos, la mala gestión de su paquete de distribución, y su prepotencia con los autores, son cosas que no deben caer en el olvido. Pero aunque todo eso se pudiera olvidar, está el tema de la ausencia de sede social Europa. Esa indefensión se suma a la mala actuación de Lulú, así que, estamos un poco a verlas venir, pero hay que pensarselo dos veces, y exigir garantías, antes de ceder el control de la explotación de nuestras obras a terceros.
admin
Gracias Juan Carlos. Me reconforta saber que alguien como tú lo ve igual que yo.
Juan Carlos
Como siempre dando en el grano y con precisión quiúrgica. En Bubok he registrado un Libro y al contratar el ISBN se realiza el Depósito Legal (pagándolo claro). Es caro, pero parece funcionar bien. Además. de momento parecen estar informando con más transpariencia que Lulú. No hace mucho, en los foros advirtieron que habían recibido un aviso informando de obligatoriedad de que todos los libros tengan ISBN y Depósito Legal, por lo que anunciaban nuevas fórmulas para conseguir ponerlo en marcha en un tiempo razonable y a costes asequibles. Veremos si cumplen.
Un saludo,
Juan Carlos
Mayte
Sólo quería comentar que, aunque se modifique la Ley de Depósito Legal, es muy importante para la conservación del patrimonio bibliográfico español, que al menos un ejemplar se siga depositando en la Biblioteca Nacional. Es la única forma de que se siga conociendo, difundiendo y conservando para la posteridad toda la producción bibliográfica de los autores de nuestro país. Quizás mi punto de vista es demasiado bibiotecario, ya que ésta es mi profesión, pero de alguna manera, figurar en el catálogo de la Biblioteca Nacional y en la Bibliografía Nacional Española supone también una pequeña «promoción» para los autores. Muchas personas visitan el catálogo de la BN para informarse sobre la obra de un autor. Por otro lado, felicidades por tu blog. Es realmente bueno.
admin
Mayte, yo estoy de acuerdo con que toad obra debería tener su depósito legal, pero en la impresión bajo demanda hay trabajos que no pretenden ser obras de consumo público.
Lo ideal sería que no se exigiera depósito legal hasta haber no superado un número de ejemplares impresos, o que no se exijan para obras sin ISBN, pero admito que es un tema complicado. Es un tema nuevo que no ha sido estudiado y se está aplicando una norma que no estaba pensada para estos supuestos.
La persona que edita un cuento para repartirlo entre familiares y amigos no está intentando publicar nada. Solo usa un sistema de impresión para sus necesidades particulares.
val
hola! una pregunta, por si alguien lo sabe… ¿y si se contrata un depósito legal con bubok se puede utilizar ese número en el libro para publicarlo con lulu o si se publica con lulu hace falta otro número de depósito legal? Saludos
admin
El depósito legal es una obligación del impresor. En algunos casos no hacerlo puede privar al autor de algún derecho o beneficio, pero no recuerdo cual era. Si el libro se imprime en varios sitios necesita un depósito legal en cada uno de ellos. Las leyes que establecen la obligatoriedad del depósito legal supongo que serán modificadas porque ha quedado obsoleta con el nuevo escenario de impresión bajo demanda de pocos ejemplares, por hoy por hoy la ley no lo considera opcional.